De 8 mil muertes asociadas al narcotráfico en 2015, se disparó a 23 mil 500 en 2022, según el estudio Índice de la Paz en México, realizado por el Instituto para la Economía y la Paz en México (IEP).
Por el contrario, las muertes violentas no vinculadas con la delincuencia organizada se mantuvieron entre 10 mil y 12 mil anuales en el mismo período.
Un análisis de la organización experta en narcotráfico, Insight Crime, descubrió que los cambios en las dinámicas del crimen organizado son el factor principal en el aumento de la violencia.
Puso como ejemplo el caso de Colima, que actualmente es considerada la entidad más violenta de México. Su situación, según el estudio, se le atribuye en gran medida al auge de las drogas sintéticas como el fentanilo y la metanfetamina.
El Índice de Paz México estimó que el impacto económico de la violencia para el país en 2022 fue de 4.6 billones de pesos (unos 230 mil millones de dólares), lo que representa un 18.3 % del producto interno bruto (PIB) mexicano y equivale en un costo per cápita de 35 mil 700 pesos (mil 988 dólares).
El estudio compara que esta cantidad fue seis veces superior a las inversiones públicas realizadas en salud y cinco veces mayor a las realizadas en educación en el mismo años.